Mi nombre es Ricardo Echavarria, soy de la República Dominicana. Soy un hermano mayor de NPH – Republica Dominicana
Tenía 10 años cuando mi familia llegó a NPH. Verás, soy 1 de 6 hijos. Tengo 3 hermanos, Orlando, Roberto, Eduardo, y mis 2 hermanas, Argentina y Esperanza que hace algos meses falleció en un accidente de tránsito. Mi mamá sabiendo que estaba a punto de morir, porque había hecho planes para que mis hermanos, hermanas y yo viniéramos a NPH. Vinimos todos menos Orlando, que se fue a quedar con una de mis tías. El día después de nuestra llegada a NPH, recibimos la noticia de que mamá había fallecido.
Estábamos completamente conmocionados, e incluso la transición de llegada al hogar a NPH fue muy difícil, especialmente sabiendo que nuestra madre había fallecido en esos días. Nuestro papá todavía estaba vivo, pero no jugó un papel en nuestras vidas y unos años después también murió. No sabía esto en ese momento, pero NPH se convertiría en mi hogar y mi familia. Y con el tiempo, me di cuenta de que este era un lugar familiar y de mucha educación y disciplina. La gente en nph cuidó de mis hermanos, hermanas y de mí todo el tiempo hasta que salimos todos de nph. Una educación y un lugar para mantener nuestros sueños vivos y mi familia unida.
La vida en NPH era diferente, podíamos jugar afuera y jugar con otros. El ajedrez sigue siendo mi juego favorito. Además de esto aprendí que me encanta leer. Pablo Coehlo escritor favorito, uno de sus libros que más me ha encantado leer es El Alquimista.
Gracias a NPH, estoy donde estoy hoy. NPH me ha abierto los ojos y me ha dado el regalo de una educación y la oportunidad de visitar otros países, que ha sido más que un sueño para mí. Tres veces solicité ir al programa Seattle Instituto y finalmente tuve éxito. Siempre me ha motivado visitar otros países. Hasta ahora he estado en Guatemala, Canadá, El Salvador y USA en donde pude estar con otros líderes de NPH y aprender inglés.
Actualmente estoy estudiando Bioanálisis en la Universidad Central del Este. Trabajo en NPH Como encargado del departamento IT y ahora estoy en el departamento de Comunicaciones. Mi visión es terminar la universidad y continuar trabaja para nph. NPH ha cambiado de una manera impresionante mi vida y de cómo ver las cosas hoy en día, ya que he aprendido mucho sobre servir a los demás y tener empatía con todos, como conocí al Padre William Wasson, aunque estaba muy pequeño recuerdo que el siempre que llegaba al hogar nos llevaba dulces y siempre con una sonrisa en el rostro, ya estaba en su silla de ruedas pero eso nunca fue una limitante para él, ya que aun así siguió visitando las de mas casa de NPH.
Invertir mis energías en NPH, que me ha protegido y cuidado cuando más lo necesitaba, me hace sentir muy orgullosa. Puedo usar mis talentos y experiencia para apoyar a una nueva generación de niños que también necesitan ayuda. NPH Casa Santa Ana es mi hogar espiritual y es donde puedo ayudar a los demás de manera desinteresada. Espero que tú también puedas hacer lo mismo.